Esto si es crear una ciudad creativa
- Eduardo Muñoz
- 21 ene 2016
- 1 Min. de lectura

Durante nuestro recorrido por la Zona colonial para realizar nuestro trabajo final observe una actividad que me parecio bastante curiosa y entretenida. Fue una excursion que le estaban dando a unos turistas no en un tren, ni a caballo ni mucho menos a pie sino en Trikke (una especie de monopatín pero de tres ruedas).
Pasear en Trikke, una especie de patinete de tres ruedas y, por tanto, con tres puntos de apoyo, se ha convertido en una de las cómodas y divertidas maneras de hacer turismo cultural con bases sostenibles en el casco histórico de Santo Domingo.
Lo pueden conducir desde niños y niñas a partir de 12 años (menores de 12 deben compartir el equipo con un adulto) hasta personas de la tercera edad.Gracias a su motor eléctrico, el usuario no tiene que realizar prácticamente ningún esfuerzo físico y eso lo convierte en una alternativa de transporte ideal también para personas con dificultades para caminar.
Las rutas por la Ciudad Colonial -modificadas mientras duraron los trabajos de remozamiento- tocan los principales monumentos antiguos y son lideradas por un miembro del personal de Trikke RD, que funge como guía y, por supuesto, como fotógrafo.
“Es emocionante”, dice uno de los turistas, quien disfrutó el recorrido en compañía de amigos.
Por tratarse de un equipo de transporte personal de bajo impacto ambiental, tiene la ventaja de que puede incursionar tanto en zonas peatonales como vehiculares.
Esta aventura con tintes históricos y culturales hay que vivirla en grupo: entre amigos, familiares, colegas o relacionados.
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